Ventajas del autoconsumo en las comunidades de propietarios

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Desde la Asociación de Ciencias Ambientales (ACA) hemos querido conocer de primera mano las impresiones y opiniones del sector de las energías renovables. Por ello, aprovechando la celebración de la Feria Genera 2013, celebrada del 26 al 28 de febrero, realizamos una serie de entrevistas sobre las barreras y posibles soluciones al modelo energético actual. Lo que se ha podido percibir ha sido, por una parte, una queja unánime del sector frente al cambio en las reglas del juego (las primas a la producción, nuevos impuestos, etc) de los últimos años y una sensación de impotencia generalizada, y por otra, la necesidad de una pronta y correcta regulación tanto del balance neto como de la certificación energética de edificios.

Desde ACA llevamos varios años trabajando por impulsar las actuaciones de rehabilitación energética de los edificios de nuestro país dentro del área de trabajo de energía y cambio climático de la asociación, facilitando argumentos y realizando estudios y materiales de utilidad, tanto para los organismos públicos, decisores en la materia, como para actores estratégicos como los administradores de fincas, que tienen la capacidad de provocar cambios de comportamiento y actitudes en las comunidades de propietarios y vecinos administrados.

Entendemos la rehabilitación energética como un proceso integral, en el que deben tomar parte y llevarse a cabo actuaciones y soluciones para garantizar la seguridad estructural, la accesibilidad y, por supuesto, para mejorar la eficiencia energética, abarcando estas últimas desde la mejora del aislamiento térmico del edificio hasta la incorporación de fuentes de energía renovables.

Se estima que más de la mitad de las viviendas del parque edificado español se concentra en menos de un 10% de los edificios, según el GTR (Una visión-país para el Sector de la Edificación en España. Hoja de Ruta para un Nuevo Sector de la Vivienda. Informe 2011), por lo que, a las bondades climáticas de un país como España se le suma el enorme potencial que tiene el parque de viviendas ubicado en bloques plurifamiliares para el aprovechamiento de las energías renovables y el cambio de modelo hacia la generación distribuida que hará posible la aprobación del Real Decreto de autoconsumo con balance neto.

Los bloques de vivienda tienen una gran oportunidad para pasar de ser meros sumideros de energía a adquirir un triple papel (consumidor, generador y exportador) una vez que se haga posible y se apruebe el Real Decreto que habilite el autoconsumo con balance neto. Esta reconversión o cambio de enfoque se inició con la aprobación del Real Decreto 1699/2011, de 18 de noviembre, por el que se regula la conexión a red de las instalaciones de producción de energía eléctrica de pequeña potencia, que daba un primer paso para el autoconsumo con balance neto y ponía las bases para un modelo de generación distribuida, más eficiente al reducir las pérdidas por transporte y el impacto de las instalaciones eléctricas en el entorno.

Cuando por fin vea la luz el tan esperado texto, los vecinos de las comunidades de propietarios podrán optar por esta opción y pasarán de ser meros consumidores de la red eléctrica a autoabastecerse en determinadas horas del día,  utilizar la red como una “batería” a la que verter el excedente de producción y continuar demandando energía y consumiendo de la red en las horas del día en las que no sea posible el autoabastecimiento. Una adecuada regulación del autoconsumo con balance neto, podría ser una perfecta solución para cubrir, por ejemplo, la demanda eléctrica de los espacios y elementos comunes de una comunidad de propietarios que, en combinación con otras soluciones como la domótica, por ejemplo, reducirían de forma más que significativa los costes de estas partidas.

Para que las comunidades de propietarios sean conscientes de esta posibilidad jugarán varios factores importantes. Por un lado, será necesario realizar una importante labor de información y sensibilización que se dirija tanto a los ciudadanos como a los interlocutores clave como son los administradores de fincas. Será necesario transmitir un mensaje claro, sencillo, que muestre los ahorros que esta nueva opción pueda reportar y que, además, permita a los ciudadanos y a las comunidades de propietarios conocer su contribución a la lucha contra el cambio climático al autobastecerse con fuentes de energía renovable. Sería deseable, por tanto, que se estableciesen incentivos (podría hacerse de muchas maneras) para las comunidades de propietarios que apostasen por esta alternativa y programas de sensibilización sobre la cuestión para incentivarlo.

Para que una comunidad de propietarios pueda optar por esta nueva opción, la Ley 19/2009 modificó ciertos aspectos de la Ley de Propiedad Horizontal, flexibilizando el porcentaje de votos favorables y las cuotas de participación necesarias para la instalación de sistemas comunes o privativos, de aprovechamiento de la energía solar, o bien de las infraestructuras necesarias para acceder a nuevos suministros energéticos colectivos. Por ello, actualmente, se necesita el acuerdo de al menos tres quintas partes de los integrantes de la comunidad que representen también, al menos, las tres quintas partes de las cuotas de participación y es de obligado cumplimiento para la totalidad de los propietarios.

Las ventajas del modelo de generación distribuida que promueve el autoconsumo con balance neto, la mejora continua de la eficiencia energética de las instalaciones de energías renovables y el más que constatable aumento del precio de las fuentes de energía procedentes del petróleo, hacen y harán en el futuro que esta opción sea cada vez más viable para viviendas y comunidades de propietarios, en términos económicos, reduciendo la dependencia de la fluctuación de precios de la energía eléctrica, ambientales, minimizando el consumo de energías fósiles y por tanto su impacto, y sociales, reduciendo su vulnerabilidad a la pobreza energética.