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ECONOMIA COLABORATIVA DE CONSUMO

ST-33. Economía colaborativa de consumo. Jueves, 27 de Noviembre de 2014 de 16.00 a 18.30 en la sala Ámsterdam

Resumen de la sesión técnica hecho por Jonathan Rodríguez Muñoz y Maisa Souza Costa. Voluntario ACA.

 

El concepto de consumo colaborativo surgió con la creación de las primeras  comunidades humanas, basadas en el concepto de propiedad común y consumo colaborativo, pero a día de hoy  está sufriendo un  redescubrimiento gracias a la tecnología digital e Internet. Se trata de un movimiento social y cultural, que busca satisfacer las necesidades mediante el intercambio de bienes y servicios a través de plataformas digitales, manteniendo un dialogo constante entre consumidor y productor.

Sus objetivos son reducir residuos, aumentar lazos de la comunidad, eliminar intermediarios, un contacto directo entre  productor y consumidor, aumentar los roles del consumidor entre otros.

En la economía colaborativa podemos distinguir tres tipos:

  1. -      Iniciativa de acceso al producto en vez de compra: En vez de comprar un objeto para que te ofrezca un servicio, alquilar ese servicio. Como ejemplo la web Blablacar.
  2. -      Mercado de Redistribución: Se trata de vender aquellos objetos no usados por el poseedor y que se encuentran en bueno estado, a través de plataformas de internet, ayudando tanto a reducir el consumo de recursos como a la producción de residuos. Ejemplos de estas plataformas son No lo tiro o Wallapop.
  3. -      Estilos de vida colaborativos: Comunidades web creadas para intercambiar conocimiento en persona, este conocimiento abarca diferentes ámbitos desde cultura o lengua a técnicas de agricultura ecológica.  Ejemplos de estos sitios web son Etsy o EatWith.

Según la ponente Carmen Valor Martinez los impulsores de este estilo económico, es un cambio social y cambio de valores hacía el compartir, la fuerte crisis económica junto a la recesión, el desarrollo de la  tecnología que permite un contacto muy directo entre personas y compartir en medio digital. También expuso que los principales impulsores de este nuevo sistema es la gente con edades en torno a 30 años.

Como todo en esta vida la economía colaborativa tiene defensores y detractores, luces y sombras. Los defensores como los consumidores piensan que es un sistema que puede revolucionar el mundo hacia un futuro mucho mejor, reduciendo la huella ecológica, crear capital social, evitar el materialismo, creando una economía no basada en el crecimiento si no en el nivel de vida. Por otro lado sus detractores como asociaciones del taxy con la aparición de Uber, o sindicatos como CCOO la acusan de piratería y economía sumergida, en la que falta regulación, en la seguridad del consumidor, en la figura del prosumidor (productor), en el trato de datos personales e impuestos. Otros creen que puede producir un efecto de sobreconsumo, una mercantilización del mundo en la que todo podría ser vendido.

Otros ponentes expusieron y explicaron sus experiencias y trabajos en diferentes webs de consumo colaborativo como Blablacar, el proyecto Traficantes de sueños y universo Crowfunding.

 

Maisa Souza Costa

Jonathan Rodríguez Muñoz